-

viernes

En solo un segundo todo tu mundo vuelve a girar sobre su eje. De repente todo encaja; un día cualquiera (un lunes, o quizás un viernes), sin previo aviso, te das cuenta de que es él.
Él es tu escondite secreto, donde te ocultas del mundo, donde todo es tan fácil como tú quieres que sea. Él es lo que permanece siempre. Es tu coartada. Él es quien sopla cuando el aire empieza (simplemente empieza) a ser escaso. También es a quien recurres cuando todo está mal o cuando sientes que la cabeza te va a estallar. En un suspiro te das cuenta de que él es tu chaleco salvavidas.