-

domingo

Odio cómo me hablas y también tu aspecto, no soporto que me mires así.  Me repugna tanto lo que siento. Odio, odio que me mientas, y que tengas razón. Odio que alegres mi corazón. Pero aún más que me hagas llorar. Odio no tenerte cerca y que no me hayas llamado. Pero sobre todo odio no poder odiarte, porque no te odio, ni siquiera un poco. Nada en absoluto.